Michalis Charalambidis
en Léo Matarasso, Seminario del 6 dicembre 2008, Cedetim, Parigi
Siento no poder estar en París contigo en este momento de conmemoración de dos queridas personas, Léo Matarasso y Jean-Marie Gaubert.
Debo confesar que en las primeras reuniones del Consejo Internacional de la Liga, a principios de los años ochenta, la persona con la que me sentía más en sintonía, especialmente por la causa de los pueblos de Asia Menor y Mesopotamia, era Léo Matarasso. De una manera muy humana, paternal, como un maestro, me dio libros. Había nacido aquí. Su ciudad natal era Salónica y en los intervalos del Consejo solíamos hablar de la ciudad.
Es su recuerdo, su ejemplo, junto con otros recuerdos, lo que me impulsó a promover la idea de un museo del holocausto en Salónica. La ciudad está formada por personas que vivieron la violencia genocida kemalista primero y nazi después. Personalmente, estuve muy vinculado a Salónica. La ciudad fue mi campo de batalla durante el periodo de la dictadura. Desde Salónica escapé clandestinamente a Italia. La Liga me llevó de Salónica a Roma, a París, a Milán, al cosmos.
Pero así era la Liga, así eran nuestros presidentes Lelio y Leo. Amor, pasión por la liberación de los pueblos y de los seres humanos.
Un abrazo a ti y a todos
Michalis
Charalambidis, Michalis
en: <strong>Léo Matarasso,
Seminario del 6 dicembre 2008, Cedetim, Parigi
Milano, maggio 2009</strong>